• Unas palabras previas (Entrevista realizada en Agosto de 2009)

    La Dra. Hilda Molina es una prestigiosa neurocirujana, profesora e investigadora científica, introdujo en Cuba el nuevo campo de la restauración neurológica. Trabajó y dio conferencias en Argelia, Estados Unidos, Francia, España, Italia, Alemania, Suecia, Inglaterra, entre otros países europeos, de América latina y el Caribe. Fue creadora, fundadora y directora del Centro Internacional de Restauración Neurológica (CIREN).
    Fue declarada Ciudadana Honorífica de Kansas City, Estados Unidos y recibió las máximas condecoraciones que se otorgan en Cuba a los científicos. Es ex diputada nacional, militante del Partido Comunista y disidente cubana. Renunció por propia decisión a todo lo que la vinculaba al régimen cubano porque no estuvo de acuerdo en que las autoridades del gobierno convirtieran el CIREN en una institución exclusiva para extranjeros, cobrando en dólares, privando de atención y discriminando a los pacientes cubanos. Devolvió todas las condecoraciones que había recibido, y Fidel Castro la acusó de ser una agente secreta encubierta de los EEUU en Cuba.

    Desde 1994 hasta el 11 de Junio de 2009 le fue negado el permiso para salir de Cuba, lo que le generó innumerables perjuicios entre los que destaco la imposibilidad no solo de continuar su desarrollo como profesional, sino que le ocasionó un daño psicológico de inmensa magnitud, al no poder ver a su hijo ni conocer a sus nietos (el mayor tiene ya 14 años). Nada menos que la pérdida de su libertad.

    Su único hijo, Roberto Quiñones Molina también neurocirujano cubano con excelente expediente, fue uno de los especialistas más reconocidos del CIREN, y luego se entrenó en España, Japón, Canadá e Inglaterra. La Dra. Hilda Molina aprovechó un postgrado de Roberto en Japón, para convencerlo que no regrese a Cuba, y desde 1994 vive en la Argentina donde tiene su propia clínica, aplica los métodos del CIREN y atiende diversas enfermedades neurológicas.

    1a. parte
    La Dra. Hilda, su mamá y Cuba hoy
    2da. parte
    El dolor que le provocó el régimen
    3ra. parte
    Terribles perfiles de su Patria
    4ta. parte
    La Dra. Hilda, su mamá y la fe católica
    5ta. parte
    Epílogo

 

 

Dra. Hilda Molina

volver

 

Copyright © 2000, 2020 - A pleno Tenis - Todos los derechos reservados