Los tiempos en que vivimos pueden ser definidos de dinбmica constante.

Bien es cierto que la primera tenista de la historia entrу en el court vestida y sigue haciйndolo asн. Ademбs, siempre se ha considerado reprobable el desnudo en estas lides, detalle muy importante para los creadores e industriales de ropa deportiva que en favor de sus intereses a travйs de los siglos, procuraron imponer el recato en la moda.
 

Es la respuesta a ese viejo apotegma que dice "mejor que mostrar es sugerir".  A pesar de que en las ъltimas dйcadas aparecieron famosos diseсadores que, segъn algunos observadores, se apartaron de la prudencia y del pudor. Pero hubo asн mismo, quienes sostuvieron que la mujer muy vestida es un poderoso elemento de atracciуn sexual. Un razonamiento y vбlido para estos tiempos, ya que por orden y gracias de ese terrible fenуmeno llamado Cнrculo de Ozono, aconsejan cubrir la epidermis lo mбs posible.
 

Podrнamos volver a la simplicidad de la moda que se luciу en la Grecia antigua. Y йsto para no tomarlo en broma.
 

May Sutton Budny fue muy criticada en Wimbledon al arremangar su amplia blusa, y Joan Lycett tambiйn fue censurada por presentarse a jugar sin medias.
 

En los aсos 20, ellas estaban ganando el derecho del voto y empezaron a hacer cosas hasta entonces vedadas.
 

Excepto durante un breve lapso, hacia 1935, cuando las mujeres usaron pantaloncitos, chombas y viseras muy bien lucidos por Alice Marble, Helen Jacobs y la argentina Mуnica Ricketts, la moda femenina para jugar al tenis, siempre fue muy atractiva, asн en la йpoca de los carruajes como en nuestros vertiginosos dнas de la era espacial, hasta principios de siglo, el estilo era algo tan importante que excluнa por completo la comodidad.
 

Las tenistas francesas, por ejemplo, competнan luciendo todos los atavнos de la йpoca, inclusive corsйs, polisуn, y sombrero de paja con cintas. En invierno, ingresaban a la cancha con tapado en estilo "maxi", de lana liviana que era ajustado a la cintura, y tenнa grandes mangas, detalle en boga cuya ausencia podrнa considerarse trasgresiуn de esta moda.
 

A principios del 900 se le hicieron varias concesiones a la comodidad. Las faldas fueron acortadas varios centнmetros y se ensancharon y ampliaron en el ruedo. Pero siempre la moda se imponнa y las damas estaban obligadas a usar blusas con mangas largas, complementбndose con corbatas y ajustadas a la cintura con una banda ancha.
 

Las ataduras, los prejuicios sociales tendнan a aflojarse y en el tenis la incomparable Susanne Lenglen no sуlo dominу el deporte de la raquea con sus habilidades, sino que tambiйn liberу a sus colegas de las incуmodas costumbres provenientes de las dйcadas pasadas. Introdujo al campo deportivo la seda liviana y los accesorios en colores vivos que llegaban a la rodilla y sus famosas vinchas de seda en la cabeza para mantener los cabellos en orden.
 

Sin duda estaba efectuando exhibiciones de la moda y las damas muy pronto adoptaron ese tipo de atuendo y sin enaguas ni corsйs, mientras que los aсos 30 mostraron a la actriz Pola Negri -que si bien no jugaba al tenis-  fue la de los aсos locos donde el charleston hacнa vibrar los cuerpos al son de su estridente mъsica y la ley seca imponнa prohibiciones entre tiroteos y violencia.
 

Y quй traerб el futuro para las competidoras en materia de ropa? La costura serб cosa del pasado?.
De lo que estamos seguros es que siempre entrarбn vestidas al court, porque, como se ha dicho al principio, nunca lo harбn sin indumentaria (ademбs estб prohibido por edicto policial).
 

Hemos traspuesto el umbral. La mujer ha ganado una importante competencia al calendario.
La moda tiene sus leyes, pero ellas llegaron al presente siglo manejando bien los matices y disfrutando su tiempo de esplendor sin perder el femenino encanto de la elegancia.
 

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